Sunday, October 22, 2006

It was just a dream

Sólo fue un sueño, pero fue aterrador. ¿Revelación?
Después de semanas hundida en una depresión absurda y dolorosa, después de pasar corajes, llantos, risas, desgarres... Mi inconsciente me traicionó.
En la irrealidad del sueño, en las situaciones casi verdaderas de las escenas, todas las etapas fueron acumulando ira y odio, aunque sin llegar a la violencia, porque en ese momento desperté. La personificación de la ira, porque no hay otra palabra, era yo. Éramos dos yos peleando por sacar esa ira, por ganar, por tener el control y el poder, una yo hombre contra una yo mujer en una lucha por ver quien sometía al otro, y gané yo... ¿Pero cual de los dos yos? Aún no lo sé, pero el miedo al despertar y haber sentido tanta ira en mí fue aterrador, las lágrimas fueron inevitables y la necesidad de auxilio incontrolable. Una de la mañana, con el terror dibujado en el rostro, volví a la realidad recordando aquellos ojos llenos de rabia que se dirigían a mí, hasta que encontré descanso y salvación en una llamada.
Nunca antes había odiado tanto… es enfermizo, no lo recomiendo.

Tuesday, October 10, 2006

Worst day of my life…with the best ending imagined

6:30 am. Hoy por la mañana, un lunes como cualquier otro, me desperté… tarde… como de costumbre, como cualquier lunes. Me bañé, desayune, me vestí... y partí al trabajo, como cualquier lunes. El metro no iba tan lleno…y eso que me fui tarde, como de costumbre. Llegué relativamente temprano, 8:15 en lugar de 8:30, y prendí mi compu. Como cualquier lunes por la mañana, aún con el sueño a medio despertar.

8:45 am. Primer caos del día. El primer mail que leí anunciaba una pequeña catástrofe en la vida de esta chica cualquiera. La muerte de un amigo. Aunque no era amigo muy cercano porque vive…vivía en Montreal, compartí muchos momentos con él, me alojó en sus casa cuando yo andaba feliz y muy contenta de paseo por sus tierras. Inevitablemente mi primer reacción fue no creerlo, volver a leer el mail tres veces hasta que ese dolor tan particular que causa la muerte empezó a subir a mis ojos, pero al estar rodeada de personas que no quiero que sepan mi intimidad, tuve que reprimir y contener el llanto que era casi inevitable.

8:55 am. Un mail de mi padre recordándome el capricho idiota de mi hermano, que viene a México sin dinero ni un lugar donde quedarse ni planes… sólo su chica, un amor efímero que él cree ser la mujer de su vida.

9:00 am. Escapo al baño para poder dejar correr las lágrimas, pero en ese momento empieza el desfile de viejas feas y cagonas, que inevitablemente chismean sobre pendejadas… misión no cumplida. Volví a mi lugar tratando pensar en otra cosa, en la escuela aunque es otra presión que no ayudó mucho. Sin embargo, la mañana continuó sin mayores inconvenientes.

2:00 pm. Espero la llegada de mis amigos para poder desahogarme y tratar de tranquilizarme un poco… pero no llegan. Entro a la clase, como cualquier otro lunes, y la maestra comenta nuestros proyectos de trabajo final: un caos total. Nadie dio una. Mi depresión de por sí a flor de piel se disparó al doble al empezar a sentirme inútil en esa carrera, sin talento y pendeja. Una pobre vieja inculta como cualquiera. Terminó la clase pero el martirio aún no terminaba, tenía la peor clase en la historia.

5:00 pm. Entro a dicha clase, sin pistas de mis amigos y cada vez más deprimida y cada vez más vacía. Un pequeño rayo de luz apareció con la llegada de A. y D. La tortura del siglo XVI siguió durante dos horas hasta que al fin salimos.

7:00 pm. El martirio no había terminado: un pinche diluvio de los mil demonios se soltó sobre CU… imposible moverse para poder llegar a mi clase de flamenco. Desisto de todo intento por cruzar la ciudad en esas condiciones, y partimos a casa de D. Creyendo que con unos pequeños paraguas lograríamos salvarnos de una empapada, un río de lodo nos obligó a mojarnos hasta las anginas. En ese punto yo ya me reía, no podía creer qué tanta mierda (como la que traíamos en los pies) pudiera pasar en un solo día.

8:00 pm. Al fin llegamos a casa de D. (que cabe decir vive a 15 minutos de donde estábamos, hicimos una hora…), mojados, con frío pero sonrientes.
8:45 pm. Decidimos el P. y yo partir a casa y estar al fin tranquilos y secos, aunque antes había que pasar por comida ya que el refri, como cualquier lunes, estaba vació. La misión compras en chanclas y escurriendo agua fue un éxito, y decidimos tomar un taxi, me merecía ser un poco consentida después de tal odisea defeña.

10:15 pm. Entrando a casa, al fin tranquila de poder llegar a dejar de pensar y dejar toda la mierda fuera, en el correo, que siempre son facturas por pagar, como cualquier lunes, veo el recibo de luz, con la fabulosa cantidad de $1036 pesos… por una persona. Totalmente lógico. Enésimo choc del día, no tengo la lana y no tengo por qué pagar esa cantidad estrafalaria cuando vivo sola. Segundo sobre, aún mas divertido… un aviso de embargo por una líneas de teléfono de las cuales se deben $2555 pesotes. Deuda a nombre de mi padre que por cierto está en Francia lidiando con los caprichos del hermano menor. No hay pedo.

10:45 pm. No sé si llorar o reír de lo absurdo que fue mi día. Decido abrir una chela y fumarme un cigarro con la grandiosa compañía del P., el único destello de esperanza en este día tan oscuro. El amado P., hizo una cena increíble, con velas y…chela, ¡a huevo!
Qué mejor final para el peor día de tu vida que una cena improvisada, preparada por el hombre al que amas, acompañados por Bel Divioleta y Darren Hayman con una rola diciéndote que no hay pedo, que el varo no va a solucionar los problemas. Las canciones nos hablan.
Citando al P.: "Todos los días deberían terminar así"

6:45 am. No como cualquier martes, decidí no ir a trabajar, aún tengo todos los eventos de ayer atravesados en la garganta y necesito descansar